22 de diciembre de 2005

Mi amor

Me has hablado de ese chico, casi un niño, que anda detrás de ti. Y yo entiendo a ese admirador enloquecido que te persigue, te toca, te habla con vergüenza de su novia al tiempo que desliza sus ojos –tan bellos en esa foto que os tomasteis– sobre tu cuerpo. Si yo tuviera dieciocho años, cariño, también te adoraría. ¿Qué quieres que te diga? Si algún día te acosa y tú cedes, si sucumbes a su empeño adolescente, puro y salvaje, yo sólo quiero oír el relato de tu voz, esa que me marea escuchar en susurro, saborear su olor en tu piel, retener para mí la belleza que él habrá depositado en ti. Quiero que mis celos de animal-hombre, el amor egoísta que me han enseñado a tener, se deshaga en tus labios.

2 comentarios:

León Sierra dijo...

Poeta generoso, ¿quién te inventó?

Anónimo dijo...

A pesar de todo, me gusta cuidar vuestro amor... con las palabras.