3 de julio de 2006

Caricia

Esta mañana me despertó tu voz acariciando mis oídos, tu mano acariciando mi costado, tu amor como una caricia sobre mi angustia por ese tiempo que no puedo exprimir como deseo y que esta mañana has llenado con ternura, suavemente, con la levedad de un instante que se expande y anula la ilusión del futuro, el recuerdo del pasado.

1 comentario:

DeCa dijo...

:)

Oscuro y negro como el café, amarguras contrastadas con el azucar de sus besos.

Un abrazo, caballeros.